EL DEBATE SOBRE EL ESTADO DE LA CIUDAD ESTUVO REPLETO DE ENFRENTAMIENTOS IRÓNICOS ENTRE GALLARDÓN Y JIMÉNEZ
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El debate sobre el Estado de la Ciudad de Madrid, el segundo que se celebra en la historia de Madrid como capital de España, comenzó con un discurso muy generalista del alcalde, destacando los logros de su equipo de Gobierno, pero fue animándose en el turno de réplica, que estuvo plagado de rifirrafes y ataques de Gallardón cargados de ironía a la portavoz del Grupo Municipal Socialista.
Aplicando aquello que "no hay mejor defensa que un buen ataque", Gallardón intentó desarmar las críticas de la oposición a su gestión, sobre todo las que le llegaron desde el PSOE, y las volvió en contra de su portavoz, Trinidad Jiménez, utilizándolas incluso para criticar las políticas de varios ministros del Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero y alcaldes socialistas.
Gallardón puso de manifiesto las contradicciones de Jiménez cuando critica aspectos como las obras de la M-30, la tala de árboles, el gasto del ayuntamiento en publicidad, la contaminación o la actuación de la Policía Municipal en los incidentes de Virgen del Puerto de Julio de 2005, si se compara con lo que hacen algunos ministros del Gobierno central y alcaldes socialistas, y pidió a la portavoz socialista que utilice el mismo rasero para todos.
Sobre el gasto en publicidad con cargo al presupuesto de las obras públicas, Gallardón dijo que "de quien lo he aprendido es del Ministerio de Fomento", y le indicó a Jiménez con ironía si había venido al debate a criticar la publicidad que de Magdalena Alvarez había hecho, por ejemplo, sobre la inauguración de la nueva terminal de Barajas.
El alcalde calificó de "temerario" que Jiménez se refiriera a los hechos de Virgen del Puerto, por los que fueron denunciados tres concejales de la oposición, porque podría contraponer la actuación de la Policía Municipal con la de la Policía Nacional en el "caso Bono" y pedir la responsabilidad de algún ministro, pero no quiso hacerlo por respeto a la Policía Nacional y por el respeto al ex delegado del Gobierno en Madrid, Constantino Méndez.
También aprovechó las críticas sobre la contaminación de Madrid para recordar que municipios gobernados por el PSOE, como los de Getafe, Alcorcón, Leganés y Torrejón están peor que la capital en esta materia. "Además de dos ministros, se quiere cargar a cuatro alcaldes", le dijo irónica y jocósamente a Jiménez.
Para defenderse de las obras de la M-30 y la carta de emplazamiento enviada por Bruselas, Gallardón sacó al ministro de Industria y recordó que, sobre la carta de emplazamiento por la actuación del Gobierno con relación a la OPA de Eon sobre Endesa, Montilla dijo que sólo era una carta más de las que recibe Endesa. "No se puede tener un doble rasero", insistió Gallardón.
Tampoco se salvó la ministra de Fomento por la tala de árboles en las obras que está llevando a cabo, ni el alcalde de Barcelona y de otras localidades madrileñas, también por talar árboles; o la ministra de Vivienda, aunque la reconoció su papel en sacar adelante la "Operación Campamento". En todos estos casos, el alcalde le recordó irónicamente y entre risas a Jiménez si deseaba el cese de todos ellos, y sí reconoció una buena gestión de José Bono.
Por su parte, Jiménez se defendió acusando al alcalde de intentar desviar el debate hablando de otras administraciones y otras ciudades, "algo habitual en su grupo, pero yo vivo en Madrid y mi misión es controlar su acción de Gobierno". "Haría una magnífica oposición en Barcelona, ¡pues váyase y hágalo!, ya que sus compañeros no deb en hacerlo muy bien allí", le espetó.
"Está usted intentando controlar a todos los ministros porque me da la impresión de que usted no se fía de lo que está haciendo el señor Rajoy en el Parlamento", agregó Jiménez. Jiménez lamentó que con los problemas que tiene Madrid, "siga usted haciendo bromas pidiendo que cese a los ministros. Me temo que eso le gustaría a usted, y no lo va a conseguir", concluyó.
Gallardón pidió a Jiménez que no le intente enfrentar con Rajoy, proque ese enfrentamiento no existe. Sin embargo, la recordó una reciente entrevista en la que la portavoz socialista decía que el único alcalde de verdad que ha tenido Madrid es Tierno Galván, olvidándose del socialista Juan Barranco, y terminó diciendo que él defiende a Rajoy y a todos los alcaldes de Madrid.
(SERVIMEDIA)
19 Mayo 2006
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