Lo hizo junto a nueve deportistas con discapacidad intelectual representante de otras fundaciones con el objetivo de resaltar la importancia de la motivación y del trabajo en equipo para superar barreras.

Cada uno de ellos realizó dos tramos de unos dos kilómetros hasta sumar 40 kilómetros en conjunto. A continuación, se encontraron para recorrer juntos los dos kilómetros y 195 metros restantes.

Para Álvaro “rue un desafío enorme”. Por ello, se preparó “con mucha constancia”, según indicó, con el fin de mejorar su marca. De este modo, aseguró que desde el comienzo dejó atrás los nervios y, en su lugar, se sintió “preparado para los relevos” de esta competición.