Pilar es una mujer de 35 años que lleva toda su vida con revisiones ginecológicas por el dolor que sufre con los periodos menstruales. “He tenido dolor desde mi primera regla y los médicos que me trataban lo veían como algo normal que se podía controlar con analgésicos”.

Por ello, admite en una entrevista a Servimedia: “Te acostumbras a que te duela y veía como normal tener que quedarme tumbada en la cama tomando medicamentos hasta que quise ser madre y no podía”. Entonces acudió a un especialista y, tras realizarle varias pruebas, la diagnosticaron una endometriosis.

Como Pilar, hay más de dos millones de mujeres en España con esta patología. Se estima que en Europa hay 14 millones de afectadas y 176 millones en todo el mundo pero estas cifras pueden ser aún mayores por el retraso en el diagnóstico. A veces, tardan varios años en detectarla, como le sucedió a Pilar.

Por ello, el director médico de las clínicas Ginefiv, el doctor Joaquín Llácer, remarca la necesidad de que existan unidades multidisciplinares de endometriosis formadas por médicos especialistas en esta enfermedad, psicólogos y nutricionistas.

ABORDAJE MULTIDISCIPLINAR

“Las causas de esta enfermedad aún se desconocen”, explicó a Servimedia el experto. “Aunque la endometriosis es benigna, en ocasiones se comporta como maligna porque no termina de curarse y se puede extender a otras zonas del organismo, por lo que su abordaje multidisciplinar es fundamental”.

Además del diagnóstico preciso por parte de un especialista en endometriosis, las pacientes también “deben seguir una dieta saludable y evitar alimentos como carnes rojas, ultraprocesados o exceso de proteínas para evitar procesos inflamatorios característicos de esta patología”. En estas unidades especializadas también se incluye al psicólogo dado que cerca del 40% de las mujeres “no podrán quedarse embarazadas “porque la endometriosis, además del dolor, también reduce la reserva ovárica”.

Una situación que conoce muy bien Pilar. “Esta enfermedad viene acompañada también de mucha ansiedad y presión porque vas a contra reloj porque la endometriosis sigue avanzando y si quieres ser madre mientras tu reserva ovárica va despareciendo”. Al menos, esta paciente consiguió hacer realidad su deseo y hoy es madre de un bebé de seis meses.

FERTILIZACIÓN IN VITRO

Ante esta situación, el doctor Llácer destaca que las técnicas de reproducción asistida “son la primera opción para estas pacientes, aunque hay que aclarar que no todas las afectadas con endometriosis tienen dificultad para tener hijos”.

Tras esperar a un posible embarazo espontáneo y no conseguirlo, el siguiente paso es realizar un estudio para descartar otras causas y en ese momento, la fertilización in vitro sería la opción elegida.

De hecho, explica el especialista, “la endometriosis disminuye la reserva ovárica. Por ello, no hay que esperar mucho tiempo para realizar los tratamientos, por lo que también se recomienda a estas mujeres vitrificar sus óvulos si no quieren quedarse embarazadas a corto plazo”.

De hecho, remarca que “a cada paciente hay que hacerle un tratamiento personalizado. Cuando prima el dolor y la calidad de vida nos preocupa, la cirugía suele mejorar de forma considerable los síntomas. Sin embargo, en el tema de la infertilidad hay que tener cuidado con la indicación quirúrgica porque puede ocasionar una pérdida de la capacidad de reserva ovárica y esto dificulta posteriormente la posibilidad de conseguir un embarazo a través de las técnicas de reproducción asistida”.

FUTURO PROMETEDOR

Sin embargo, el doctor Llácer remarcó que en los próximos años se producirá una revolución en cuanto a los tratamientos crónicos de esta enfermedad que mejorarán la calidad de vida de la paciente.

“Se ha desarrollado un fármaco que hasta ahora solo se podía administrar de forma intramuscular y que ahora podrá ser por vía oral. Cuando se trata esta enfermedad somos eficaces para disminuir su actividad pero esto ocasiona sintomatología similar a la menopausia como sofocos o sequedad vaginal. Por ello, se están introduciendo en el mercado tratamientos orales que llevan ambos fármacos: uno encaminada a disminuir la actividad de la endometriosis y otro a disminuir síntomas que acompañan a esa medicación”.

La comercialización de este tipo de fármacos es inminente en España porque ya están disponibles en otros países. Asegura que son “unos nuevos tratamientos que van a cambiar la calidad de vida de las mujeres con endometriosis”.