GREENPEACE DENUNCIA EL EMPLEO DE MADERA ILEGAL EN LA AMPLIACION DEL MUSEO REINA SOFIA
- Activistas de la organización descuelgan una pancarta con el lema "Crimen forestal"
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Escaladores de la organización ecologista Greenpeace descolgaron esta mañana una gran pancarta en el Museo Reina Sofía, de Madrid, para denunciar que en la ampliación del centro se ha utilizado madera procedente de talas ilegales.
Según dununcia la ONG, la madera de jatoba utilizada en suelos, paredes y falsos techos proceden de empresas con un amplio historial delictivo en el estado brasileño de Pará, región asolada por la tala y la deforestación ilegal.
La pancarta, de cien metros, fue desplegada en la nueva fachada del museo bajo el lema "Crimen forestal en el Reina Sofía" y ha sido pintada con motivos del "Guernica" de Picasso.
Otro grupo de activistas de Greenpeace precintaron simbólicamente el nuevo edificio del museo y pintaron el suelo de la entrada con árboles y el mensaje "Exposición permanente: crimen en la Amazonia".
En la acción han participado un total de 41 voluntarios que, además, han repartido postales con la denuncia ecologista entre los visitantes, para que las entregaran en la recepción del museo.
El objetivo de estas acciones, explicaron los responsables de Greenpeace, ha sido denunciar que las obras de ampliación del museo, diseñadas por el arquitecto Jean Nouvel, han sido llevadas a cabo produciendo un grave impacto ambiental en la Amazonia brasileña, una de las extensiones de bosque primario con mayor biodiversidad del planeta.
"Para la obra se ha tenido que talar una superficie aproximada al Parque del Retiro de Madrid", dijo Miguel Angel Soto, responsable de la Campaña de Bosques de Greenpeace, quien añadió que "es urgente poner fin a esta situación y forzar a la Unión Europea a crear una ley que prohíba la entrada de madera ilegal".
(SERVIMEDIA)
20 Oct 2005
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