En la prisión navarra hay en la actualidad 110 insumisos. Del total, 48 permancen en segundo grado, después de haber secundado un plante cuando estaban disfrutando de salidas diurnas y permisos. Aprovechando uno de estos permisos no acudieron a dormir una noche a prisión, motivo por el que fueron recalificados.

Este grupo efectuó hoy una acción de protesta en los patios de la cárcel de la capital navarra, donde desplegaron una pancarta y profirieron diversos gritos.

Asimismo, hicieron llegar un escrito en el que aseguran que "apostamos por una respuesta política, el plante, dado que la medida del Gobierno de calificarlos en tercer grado en el momento en el que ingresan en prisión, "sólo pretende inmovilizarnos".

"La insumisión es una respuesta en sí misma para quienes no queremos colaborar con el militarismo y las injusticias que los ejércitos alimentan en la sociedad y en la naturaleza", afirman.

Desde su punto de vista, "el tercer grado es inaceptable; queremos que la insumisión sirva para algo más que para lograr simples rebajas de la represión. Sería desalentaor que termináramos aceptando una normalización de la represión de la insumisión".

Por todo ello, y aun respetando a aquellos insumisos cuyas situaciones personales "les impiden elevar su nivel de compromiso", este colectivo apuesta decididamente por no acceder al tercer grado, "que nos perjudica a todos como presos de conciencia y alienta al Estado a seguir pretendiendo la desunión y el debilitamiento del movimiento".