Según ese informe, publicado recientemente por el Centro de Investigaciones Sociológicas, la existencia de discriminación en la aplicación de la Ley, dependiendo del sexo del individuo, está demostrada con el seguimiento de las sentencias judciales del Tribunal Tutelar de Menores.

Conforme a las estadísticas de las sentencias del Tribunal Tutelar de Madrid, las menores son más penalizadas que los muchachos cualquiera que sea el delito cometido, no solo cuando se las acusa de conducta moral irregular sino también cuando han sido detenidas por robo, con o sin intimidación, u otra infracción, exceptuando el hurto.

Los mismos datos revelan que, en la actualidad, existe una mayor proporción de mujeres que de hombres bajo medidas duraderasy severas, sin que exista diferencia por tipo de infracción cometida ni año de apertura del expediente.

Sólo en la primera intervención del Tribunal, pasaron a internamiento el 36 por ciento de 187 chicas frente al 19 por ciento de 528 chicos. Por el contrario, la proporción de varones jóvenes en medidas leves supera al de las mujeres, un 39 por ciento de chicos frente a sólo un 10 por ciento de chicas.

Según ese mismo informe, la Justicia española es más severa con las jóvenes que el resto de lo países europeos donde se sanciona a las chicas con menos dureza que a los hombres si cometen delitos tipificados como tales en Código Penal.

Si la infracción es contra la moral dominante (conducta irregular, insumisión paterna,...), los jueces europeos actúan con mayor dureza en el caso de las mujeres. Mientras en los varones prima el criterio de "violencia" y "gravedad del delito", en las mujeres es la "protección a la moral y las buenas costumbres".