Marlaska se refirió a esta cuestión en el Pleno del Congreso, donde el diputado del PNV Mikel Legarda le preguntó sobre qué medidas va a adoptar “ante las alarmantes noticias de casos de corrupción en el seno de la Guardia Civil”.

El ministro respondió que no existe ninguna corrupción “generalizada” en la Benemérita y que el planteamiento de la actual cúpula de Interior es tener “tolerancia cero” hacia cualquier conducta irregular dentro de las Fuerzas de Seguridad del Estado.

Apuntó que los “más interesados” en indagar en el ‘caso Cuarteles’ son los propios guardias civiles y que la unidad de Asuntos Internos de este cuerpo estaba investigando este asunto en 2017.

COMO EL ‘CASO ROLDÁN’

Según Marlaska, estos agentes “elevaron” a sus superiores la investigación que habían hecho sobre el ‘caso Cuarteles’, con el fin de fuera puesta en conocimiento de los jueces, al entender que podía haber “conductas ilícitas”.

Sin embargo, el ministro afirmó que el Ejecutivo de entonces, que presidía Mariano Rajoy, “parece ser que paró esa investigación”. Sostuvo que las pesquisas se reiniciaron en junio de 2018 “cuando llegó este Gobierno”, porque el Gabinete que preside Pedro Sánchez busca aclarar “todas las conductas delictivas”.

Añadió que desde Interior se seguirá “investigando” el ‘caso Cuarteles’, al tiempo que indicó que no podía aportar más datos al respecto al tratarse de una causa que está siendo instruida por los jueces.

Por su parte, Legarda criticó que, hasta la fecha, el ministro no ha dado “ninguna explicación pública” sobre estas presuntas irregularidades en el Instituto Armado, de las que dijo que recuerdan al ‘caso Roldán’. Este parlamentario resaltó que parece que estamos ante una “red corrupta” que afecta a altos mandos y que causa “perplejidad”, “indignación” y “daño reputacional” a la Guardia Civil.