En una entrevista a Servimedia, Alegría recordó que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ya abordó esta cuestión “hace nueve meses” con Feijóo cuando se reunió con él por primera vez en abril de 2022, pero desde entonces no se han producido avances pese a que ambos han manifestado públicamente su voluntad e incluso se han reunido por separado con el Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi) para tratar de impulsar la reforma.

“Es una de las propuestas claras que nosotros queríamos llevar adelante”, señaló Alegría en vísperas de que el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, y la secretaria general del PP y portavoz de esta formación en el Congreso de los Diputados, Cuca Gamarra, se reúnan este miércoles en un nuevo intento de desencallar la cuestión.

Alegría argumentó que el PSOE quiere aprobar en las Cortes Generales una reforma del artículo 49 de la Constitución, para lo que requiere un amplio consenso parlamentario de tres quintos que exige el apoyo del PP, con el fin de que las personas con discapacidad sean denominadas como tal, de acuerdo a lo establecido por la Convención Internacional de Naciones Unidas sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad en 2006 y a lo reclamado por el Cermi en los últimos años.

La ministra adujo que “es de dignidad absoluta” realizar esta modificación de la Carta Magna y confió en que pueda “ser efectivo” en los próximos meses. “Es una propuesta que llevamos trabajando desde el Partido Socialista desde el primer momento y no le quepa ninguna duda”, dijo.

Alegría confió en que pueda alcanzarse un acuerdo con el PP para realizar el cambio en la Constitución. “No quiero introducir ningún término bélico en esta cuestión, pero vamos a dar la batalla para hacer realidad algo que es justo y absolutamente necesario”, insistió.

CUATRO AÑOS SIN ACUERDO

La reforma del artículo 49 de la Constitución está paralizada por la obligación parlamentaria de que PP y PSOE se pongan de acuerdo, ya que el artículo 167 obliga a que “los proyectos de reforma constitucional deberán ser aprobados por una mayoría de tres quintos de cada una de las Cámaras”.

En diciembre de 2018, se alcanzó un acuerdo entre todos los partidos en la Comisión de Discapacidad del Congreso de los Diputados para cambiar la Carta Magna, pero el anticipo de las elecciones generales para abril de 2019 y la disolución de las Cortes Generales dejó sin efecto los pasos que ya se habían dado.

La exvicepresidenta del Gobierno Carmen Calvo retomó el asunto en mayo de 2021 con la aprobación en el Consejo de Ministros de un texto que no había sido consensuado con las demás formaciones, al contrario de lo sucedido tres años antes, y el Partido Popular de Pablo Casado se desmarcó de la iniciativa al entender que el Ejecutivo pretendía imponer una literalidad sin contar con la oposición ni con el sector. Incluso, sugirió en varias ocasiones que Pedro Sánchez y sus socios independentistas podían aprovechar el retoque para abrir una modificación de mayor calado.

Cuando Alberto Núñez Feijóo tomó las riendas del PP en abril de 2022, manifestó desde el inicio su disposición a reformar el artículo 49 de la Constitución y habló de ello con el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, cuando se vieron pocos días después. Sin embargo, no fueron capaces de dar ningún paso adelante.

El Comité de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi) se ha reunido desde el verano tanto con Sánchez como con Feijóo para tratar de promover un cambio que dignifique la referencia constitucional a este colectivo.

Mientras tanto, el trámite parlamentario ha seguido su curso en el Congreso y los demás partidos han aprovechado la reforma para proponer una modificación más amplia de la Carta Magna. Por ejemplo, el PNV ha pedido que el cambio sirva al mismo tiempo para eliminar el artículo 155 que permite intervenir una comunidad autónoma (como sucedió en Cataluña en 2017) y Ciudadanos ha apostado por modificar el sistema electoral a través del artículo 68.

El presidente del Grupo Social ONCE, Miguel Carballeda, afirmó a este respecto a mediados de diciembre en un acto organizado por Servimedia que la reforma del artículo 49 de la Constitución es "una cuestión de dignidad” y recordó que el sector de la discapacidad lleva “muchos años luchando por esto”.

“No nos da de comer este asunto. Otros sí. Pero es una cuestión de dignidad”, subrayó Carballeda, quien lamentó que la redacción actual de ese artículo “duele”. “Confío en que en poquito tiempo seamos capaces, sean capaces en el mundo de la política, de arreglarlo. Y si no, es que son realmente incapaces. Yo espero que se empeñen en demostrar que sí son capaces de ponerse de acuerdo para algo que les han pedido, desde hace muchos años, las personas con discapacidad de este país”.