Preguntado al respecto en una rueda de prensa anterior a la Junta de Portavoces, Sánchez Serna recordó que en diciembre su partido “decidió abandonar Sumar para poder hacer política, plantear sus propias iniciativas, hablar en los plenos”, y “ser muy respetuoso con las decisiones que tomara otro proyecto político que no es el nuestro”.

“Hoy no va ser distinto”, despejó la pregunta, pasando a resaltar, como desde el domingo otras dirigentes de Podemos, que en las elecciones dio “un paso muy importante” y ha “vuelto a poner una izquierda transformadora en pie”. “Salimos de las elecciones con más ganas para construir este proyecto político”.

Fuentes del partido subrayaron que, no habiendo citas electorales en el horizonte, no tiene sentido plantearse una reunificación de la izquierda, ya que lo que pueda deparar el futuro es imprevisible. No obstante, sí coincidieron en el análisis que ayer verbalizó el ex secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, de que la dimisión de Díaz sí significará el fin de Sumar, porque la esencia del proyecto es precisamente que pivota en torno a ella.

Sánchez Serna también reiteró la advertencia de Podemos sobre la subida del bloque reaccionario y de que “no se le para asumiendo discursos belicistas propios de la derecha” o “calcando la política de vivienda”, ni tampoco “con moderación o cobardía ideológica”.

Por eso, insistió en que el Gobierno “tiene que salir de este letargo y ponerse a trabajar para dar respuesta a los problemas de una gran parte de la ciudadanía”, porque, si no, se corre el riesgo de que la legislatura “sea una larga agonía que le pone una alfombra roja para que llegue un Gobierno de la derecha con la extrema derecha”.

“Hay tiempo para evitarlo, pero hace falta un Gobierno valiente y ahí van a encontrar a Podemos”, emplazó, garantizando que el compromiso por los derechos sociales y contra los recortes va a ser “la brújula” que guíe su acción política. “Esperemos que el Gobierno acabe con la parálisis legislativa”, remató.