Guiada por la presidenta del Tribunal Supremo y del CGPJ, Isabel Perelló, la gala se convirtió en una plataforma para reconocer el trabajo de individuos e instituciones que luchan diariamente para defender los derechos de las personas con discapacidad y para cambiar la mentalidad social con el objetivo de lograr un "mundo sin barreras".

La presidenta del Foro de Justicia y Discapacidad, Isabel Revuelta, dio la bienvenida a los asistentes, destacando el compromiso de la institución en promover "una sociedad más justa y equitativa". Resaltó los avances legislativos alcanzados en la última década, como la modificación del artículo 49 de la Constitución y la aprobación de la ley ELA. Aunque también advirtió que no se puede caer en "la autocomplacencia", y reclamó que el reconocimiento de un derecho por norma jurídica "debe ir acompañado de las medidas necesarias para su aplicación efectiva".

En la categoría de 'Trayectoria personal', el galardón recayó sobre el jurista y director del Grupo Social ONCE, Miguel Ángel Cabra.

El motivo del premio fue su continuo compromiso por las causas sociales y su impacto duradero. Cabra dedicó el premio a todos los juristas que trabajan por y para las personas con discapacidad y sus familias y compartió su propia experiencia vital que le llevó a tomar conciencia en este ámbito.

Mencionó los retos actuales señalando que, a pesar de los avances legislativos, la aplicación de las leyes que velan por los derechos de las personas con discapacidad no siempre se aplican bien, lo que va "en contra de la autonomía de las personas con discapacidad". Además, puso de manifiesto la creciente convergencia entre el movimiento asociativo de las personas con discapacidad y el de personas mayores.

CENTRADOS EN LA 'INCLUSIÓN SOCIAL'

Los segundos en recibir premio fueron la Fundación Prode, reconocida en la categoría de 'Actuación empresarial'. Desde sus orígenes en 1984, impulsada por familias de la comarca cordobesa de Los Pedroches, Prode ha luchado y trabajado por la inclusión y la inserción social a través del empleo.

El presidente de la Fundación Prode, Blas García, recibió el galardón y enfatizó en la importancia del empleo como palanca para la "inclusión social y la felicidad de las personas". Además, quiso dar importancia a la autonomía que ganan las personas con discapacidad al tener un puesto de trabajo.

En la categoría dedicada a las instituciones, recibió el premio el Hogar Don Orione. Esta entidad sin ánimo de lucro gestiona un centro residencial especializado en la asistencia y cuidado de personas adultas con discapacidad intelectual gravemente afectadas y con alto nivel de dependencia.

Recogió el galardón la directora adjunta del Hogar Don Orione, Ana Moral, quien agradeció el reconocimiento y destacó la labor de la congregación religiosa que inició el camino de la entidad en 1967. Subrayó que, aunque no todas las personas con las que trabajan pueden acceder a un empleo, el objetivo es "hacerles la vida más fácil y feliz" ofreciendo servicios residenciales, de salud, ocio y atención a las familias.

"INCANSABLE LABOR"

El exfutbolista Juan Carlos Unzué también fue una de las figuras centrales de la gala, galardonado en la categoría de 'Medio de comunicación social' por su "incansable labor" en la concienciación sobre la Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA).

A través de numerosas entrevistas, publicación de artículos y participaciones en documentales, Unzué ha dado voz a quienes, como él, sufren esa enfermedad neurodegenerativa. El presidente de la Fundación Luzón, Fernando Escribano, quien recibió el premio en su nombre.

Durante su discurso, Moral enfatizó la urgencia de aplicar la ley ELA, aprobada hace siete meses, cuyas ayudas aun no han llegado a las personas que las necesitan. Destacó la cruel realidad de una enfermedad como la ELA, donde la decisión de vivir o morir, a menudo "está condicionada por la capacidad económica de los enfermos".

La presidenta del Tribunal Supremo y del CGPJ clausuró el acto reiterando el profundo respeto que sentía hacia estas personas y asociaciones, además de a todos aquellos que "dedican su trabajo a la defensa de los derechos de las personas con discapacidad".

Destacó la labor generosa, constante y a veces poco reconocida socialmente de los premiados, y la valentía de quienes luchan diariamente por su plena inclusión, sirviendo de ejemplo para superar dificultades y construir una sociedad mejor.

"DEFENSA DE DERECHOS E INTERESES"

Subrayó que el poder judicial, como responsable de la "defensa de los derechos e intereses de los ciudadanos, le corresponde la labor de tutela y protección de todas las personas con algún tipo de discapacidad que necesitan acudir a la Justicia".

Anunció además que el CGPJ está trabajando en la elaboración de una 'Guía Práctica para la protección de los derechos de las personas con discapacidad en el proceso penal'. Recordó que la garantía de valores esenciales como el respeto y la igualdad es una tarea que atañe a todo el conjunto social y que necesita de la complicidad y el compromiso de cada persona y de cada institución.

La ceremonia concluyó con una actuación musical y la tradicional 'foto de familia', sellando de esta forma una jornada de reconocimiento y compromiso.