Así lo dijo Botín durante la rueda de prensa para dar detalles de los resultados obtenidos por el banco en 2023, con un beneficio neto de 11.076 millones de euros, cifra récord y un 15% más que en 2022.

Botín fue preguntada por el impuesto y reiteró su posición en contra señalando que “no es la forma de ayudar a la economía” y que no entiende “que se penalice a un sector por encima de otros” que además tiene un margen de ganancia “del 2%”. Añadió que “la mejor manera de recaudar más es crecer más” y que las empresas “ganen más”. Incidió en que el “gran reto” de España y el mundo es que el crecimiento es bajo y éste viene del sector privado.

Aunque destacó que España es de las economías con mayor previsión de crecimiento económico, “pensamos que es muy importante acelerar la inversión”.

Al ser preguntada por la relación con el Gobierno, dijo que el banco trabaja con los gobiernos de todos los países y tiene una relación “excelente con todos” aquellos que son “democráticamente elegidos”. “En España hemos puesto en marcha programas de colaboración público-privada que han funcionado muy bien y lo seguiremos haciendo siempre que exista la posibilidad de hacerlo”, agregó.

Por otra parte, sobre la estructura del salario de los directivos y su petición de que se elimine el tope en el variable en Europa, Botín dijo estar de acuerdo con las normas, pero apuntó que la relación entre la parte fija y la variable “es una limitación que no es beneficiosa para nadie” y “sería bueno para todos el que hubiera más flexibilidad”.

Preguntada por otro asunto de actualidad como es la vacante que quedará este año en el puesto de máxima responsabilidad del Banco de España, con la finalización del mandato del actual gobernador, Pablo Hernández de Cos, confió en que se elija a “la mejor persona posible” y consideró que “es buenísimo que haya diversidad de opciones, si se puede escoger entre un grupo diverso habrá que intentar poner a la mejor persona”.

Botín aprovechó para destacar que, en puestos directivos, el Santander ha pasado a tener ya un 30% de mujeres directivas y en el conjunto de la plantilla se da un equilibrio entre hombres y mujeres. “Cuando la gente dice que no hace falta hacer algo más es que no ve lo que yo estoy viendo, muchas reuniones a las que voy sigue siendo mayoría enorme sin diversidad de género, sí creo que hay que hacer esfuerzo”, apuntó.