En declaraciones a Servimedia, López Garrido atribuyó el descenso a que desde las últimas elecciones generales "no se ha rectificado ni cambiado la acción política, haciendo un discurso limitado", y advirtió que "si se sigue epeñado en no cambiar nos vamos al hoyo".

A su juicio, "los electores no son tontos y se dan perfectamente cuenta de que IU no tiene nada que proponer" porque "no ha habido una reconsideración tras las elecciones" y además "discursos como la vuelta a la República, la amenaza de la ruptura del consenso constitucional y la advertencia de que aquí en España ha habido un golpe de Estado no hacen más que alejar a los ciudadanos de IU".

El dirigente de Nueva Izquierda también manifestó que "si seguimos erre que erre' en la misma línea, con desencuentros con los sindicatos y sin aprovechar la poca oposición que está haciendo el PSOE, hipotecado al Gobierno, el descenso podría ser incluso mayor".

También advirtió que buena parte de la caída en el barómetro de Demoscopia se debe a que "los votantes de IU están desconcertados y desconfiados de una formación que está dejando de ser plural al no admitir al PDNI" y que no puede ser sólo "el PCE vestido de lagarterana".

Respecto a la valoración de Juli Anguita, coordinador general de IU, que se encuentra ahora en un cuarto puesto, adelantado esta vez por Jordi Pujol, López Garrido afirmó que "es lógico y normal, ya que el fenómeno de descenso de IU es paralelo al de Anguita".