Esa carta fue enviada después de que el ministro de Defensa belga, Sander Loones, perteneciente al partido nacionalista flamenco N-VA, apoyara en su perfil de Twitter a los políticos independentistas que se han declarado en huelga de hambre, según informaron a Servimedia fuentes gubernamentales.

En ese mensaje Sanders escribió el siguiente mensaje: “Encerrados durante más de un año sin ser condenados. El tribunal español ni siquiera ha juzgado su caso para evitar que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos pueda pronunciarse. Ahora se ven obligados a hacer una huelga de hambre. Ningún demócrata debería guardar silencio sobre esto”.

El titular de Defensa belga se refería con este mensaje a la decisión de Jordi Sànchez, Jordi Turull, Josep Forn y Joaquim Forn, actualmente en prisión preventiva, de declararse en huelga de hambre en protesta por el bloqueo que, dicen, mantiene el Tribunal Constitucional sobre sus recursos de amparo.

Este pronunciamiento del ministro de Defensa belga motivó que el martes Borrell expresara, en unas declaraciones a los periodistas a su llegada a una reunión de la OTAN en Bruselas, el malestar del Gobierno español y anunciara una respuesta al mismo.

Finalmente, el jefe de la diplomacia española ha optado por enviar una carta de queja a su homólogo belga en la que expresa su malestar por los pronunciamientos de distintas autoridades de Bélgica referidas a la cuestión independentista catalana.

Este es el último capítulo de los encontronazos diplomáticos que el actual Gobierno ha mantenido con Bélgica a cuenta del desafío independentista. El punto álgido se alcanzó el pasado mes de octubre cuando Borrell convocó al embajador belga en España, Marc Calcoen, para retirar el estatus diplomático al delegado del Gobierno de Flandes en España, André Hebbelinck, en protesta por las declaraciones del presidente del Parlamento de Flandes, Jan Peumans, en contra de España.

Previamente, el embajador belga fue convocado otras dos veces en apenas 21 días para trasladarle el malestar del Gobierno por los pronunciamientos de Peumans sobre la calidad de la democracia española.