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Elecciones generales

Iglesias presume de su campaña de propuestas mientras sus rivales hacían “el payaso”

MADRID
SERVIMEDIA

El candidato de Unidas Podemos a la Presidencia del Gobierno, Pablo Iglesias, se enorgulleció este viernes en el cierre de la campaña electoral de que mucha gente, les vote o no, piensen que los de este partido fueron “los únicos serios que estuvimos haciendo propuestas y no haciendo el payaso”.

Ante un auditorio al aire libre del Parque Lineal del Manzanares de Madrid repleto con 6.000 personas entre gradas, escenario y alrededores, Iglesias resumió la campaña diciendo que Unidas Podemos ha conectado con “una mayoría social que no se deja tomar por estúpidos” mientras, en los debates y fuera de ellos, sus rivales se enfrascaban en “una campaña de insultos” y teatro de intercambio de libros como el de Pedro Sánchez y Albert Rivera.

Sosteniendo la posición de hombre serio y moderado que tanto se le alabó en los debates televisados, Iglesias diagnosticó que muchos españoles se preguntaron “por qué están ustedes haciendo el payaso”.

Unidas Podemos, por el contrario, ha hablado “de lo que le importa a una inmensa mayoría de los españoles piense lo que piense”. Que le reconozcan eso incluso quienes no le van a votar, dijo, es “un honor”.

Por lo demás, Iglesias desgranó algunos de sus temas habituales de campaña o de los últimos días de la misma, como que sus denuncias de que los poderes económicos tienen más influencia que los políticos no han sido replicadas. “Mira que dicen cosas de nosotros y no ha salido nadie diciendo que estábamos mintiendo”. O que desde que él abanderó los derechos sociales de la Carta Magna y exigió su cumplimiento, los otros partidos “ya no quieren hablar de la Constitución. ¿Qué fue de esa asignatura?”, preguntó por la propuesta de Albert Rivera.

Recordó también que en Nalda un vecino (él dijo un grupo de ultraderechistas) le espetó un “viva España”, y que él le contestó haciendo suya la proclama. “Ningún patriotero de charanga y pandereta, los perros de los ricos, nos va a dar lecciones a nosotros de lo que significa ser españoles”, proclamó, ante el deleite de los espectadores puestos en pie.

Esta introducción le valió para insistir, como esta mañana en Valladolid, en que está “orgulloso de ser español”, pero matizando que le gusta España por su pluralidad, le duele España por las condiciones laborales de los profesionales educativos y sanitarios y se siente “orgulloso de ser español” por la lucha de los pensionistas, las feministas, los taxistas o las camareras de piso. Acto seguido, censuró a quienes “tienen la desvergüenza de cantar ‘El novio de la muerte’ mientras niegan a los militares mayores de 45 años el derecho al trabajo”, otra de las causas más defendidas por Podemos y a la que no se había referido en campaña.

Finalmente, Iglesias embocó en la ya habitual distinción con el PSOE, a la que ya se refirieron antes que él otros oradores. Desde el reproche a las puertas giratorias y las dos reformas laborales, también la de José Luis Rodríguez Zapatero, proclamó que la mayoría social “tiene un solo voto útil”, el de Unidas Podemos, porque “lo que va a hacer el PSOE ya lo sabemos”.

Una vez más, dio por hecho que el PSOE y Ciudadanos pactarán si pueden, porque los aparatos del Partido Socialista presionarán a Sánchez y, aunque Rivera lo niegue, “¿alguien tiene alguna duda de que Ciudadanos va a hacer hacer algo distinto de lo que le diga el Ibex?”

Así, el líder de Podemos terminó con su arenga de que la política sí que vale para cambiar cosas, pese al “planteamiento enormemente reaccionario” que lo niega, y de ahí que los ricos compren políticos y, como a ellos no les pueden comprar, les persigan con las cloacas del Estado.

A todos sus simpatizantes les aseguró que “los espacios parlamentarios más importantes están en la familia, el bar, la cola el paro, el centro de trabajo”; sitios donde hay “mucha gente decente que igual no nos ha votado nunca pero sabe que somos gente decente y estamos dispuestos a asumir el reto de la justicia social”. Gente a la que se puede convencer. “Que no se quede ni uno sin votar”, pidió, en este día “excepcional” en el que la gente normal tiene más poder que los poderosos, “uno de esos días cuando la democracia puede ganar a los poderosos”. “El próximo domingo podemos ayudar a cambiar la Historia”, arengó como remate, antes de que se oyera, por primera vez en la campaña, la canción “Todo cambia” de Mercedes Sosa.

(SERVIMEDIA)
26 Abr 2019
KRT/gja