Ciencia

El consumo de cannabis empezó hace unos 2.500 años en China

- Se consumían en rituales funerarios y el cannabis se propagó después por la Ruta de la Seda, según un estudio

MADRID
SERVIMEDIA

El origen del consumo de marihuana puede remontarse al primer milenio antes de Cristo en el oeste de China porque un grupo de investigadores ha encontrado en la cordillera de Pamir la primera evidencia de compuestos psicoactivos de tetrahidrocannabinol (THC) en quemadores de incienso funerarios que datan de hace unos 2.500 años.

Así se recoge en un estudio reralizado por investigadores del Instituto Max Planck para la Ciencia de la Historia Humana (Alemania), la Universidad de la Academina China de Ciencias y la Academia de Ciencias Sociales de China, y publicado en la revista 'Science Advances'.

El cannabis se cultivó en el este de Asia por sus semillas oleaginosas y su fibra hace al menos 4.000 años, pero poco se sabe sobre el uso temprano y el eventual cultivo de la planta por sus propiedades psicoactivas y medicinales. Pese a ser actualmente una de las drogas psicoactivas más utilizadas en el mundo, hay poca evidencia arqueológica o histórica del uso de la marihuana en el mundo antiguo.

Sin embargo, las variedades de cannabis cultivadas tempranamente tenían bajos niveles de THC y otros compuestos cannabinoides con propiedades psicoactivas, por lo que se ha mantenido durante mucho tiempo el misterio de cuándo y dónde los humanos emplearon por primera vez las variedades específicas de la planta con los niveles más altos de compuestos capaces de alterar la mente.

RITUALES FUNERARIOS

El nuevo estudio indica que los investigadores han identificado compuestos psicoactivos de cannabis conservados en braseros funerarios desde hace 2.500 años en el cementerio Jirzankal, al este de las montañas de Pamir (oeste de China), que muestran que entonces se selecionaban plantas con niveles más altos de THC y se quemaban como parte de los rituales mortuorios.

Se trata de la evidencia más antigua encontrada hasta ahora de la utilización del cannabis por sus propiedades psicoactivas. Es decir, consumir marihuana para actividades rituales y religiosas se practicó en el oeste de China hace al menos 2.500 años.

Los investigadores descubrieron el uso psicoactivo del cannabis cuando utilizaron cromatografía de gases y espectrometría de masas para aislar e identificar compuestos conservados en antiguos quemadores de madera descubiertos por arqueólogos de la Academia China de Ciencias Sociales, que excavaron en las regiones montañosas del este del país.

Para su sorpresa, hallaron que la huella química de los compuestos aislados coincidía exactamente con la huella química del cannabis y que había un nivel más alto de THC del que normalmlente se encuentra en las plantas de cannabis silvestre.

Por tanto, arqueólogos y científicos de laboratorio de Jena (Alemania) y Pekín (China) se toparon con una clara evidencia de que hace unos 2.500 años en las montañas de Pamir se quemaban variedades específicas de cannabis para elevar los niveles de THC. Este hallazgo corrobora otras pruebas tempranas de uso de cannabis en enterramientos más al norte, en la región china de Xinjiang y en las montañas de Altai (Rusia).

"Los hallazgos apoyan la idea de que las plantas de cannabis se utilizaron por primera vez por sus compuestos psicoactivos en las regiones montañosas del este de Asia Central y luego se propagaron a otras regiones del mundo", apunta Nicole Boivin, directora del Departamento de Arqueología del Instituto Max Planck para la Ciencia de la Historia Humana.

RUTA DE LA SEDA

El estudio sugiere que el cannabis probablemente se propagó por motivos comerciales a lo largo de la antigua Ruta de la Seda, que fue el vector más importante para la difusión cultural en ciertos momentos del pasado. "Las rutas de intercambio de la primera Ruta de la Seda funcionaron más como los radios de una rueda de carreta que como una carretera de larga distancia y situaron a Asia Central en el corazón del mundo antiguo", indica Robert Spengler, también del Instituto Max Planck, quien recalca: "Las variedades de la planta de cannabis estaban entre las tradiciones culturales que se extendían a lo largo de estas rutas de intercambio".

Los científicos sugieren que las personas que recorrían las altas regiones montañosas de Asia pudieron haber descubierto plantas silvestres más potentes allí y cultivar más variedades psicoactivas del cannabis para usarlas en rituales de entierro.

Mientras que el cannabis moderno se usa principalmente como una droga recreativa o para aplicaciones médicas, en el pasado pudo haberse utilizado de manera diferente. La evidencia de Jirzankal sugiere que hace unos 2.500 años se quemaba cannabis en rituales que conmemoraban a los muertos, cuando se enterraba a los parientes en tumbas sobre las que se creaban montículos circulares, anillos de piedra y patrones de rayas con piedras blancas y negras.

No está claro si el cannabis también tuvo antiguamente otros usos, aunque parece probable que la capacidad de la planta para tratar una variedad de enfermedades y síntomas fue reconocida desde el principio. "Este estudio sobre el uso antiguo de cannabis nos ayuda a entender las prácticas culturales humanas más tempranas y habla sobre la conciencia humana intuitiva de los fitoquímicos naturales en las plantas", indica Yimin Yang, de la Universidad de la Academia China de Ciencias.

"Dado el clima político moderno que rodea al consumo de cannabis, estudios arqueológicos como este pueden ayudarnos a comprender los orígenes de la práctica cultural contemporánea y las estructuras de creencias, que, a su vez, pueden poner al corriente a la política", comenta Boivin, mientras que Spengler concluye: "Las perspectivas modernas sobre el cannabis varían enormemente entre las culturas, pero está claro que la planta tiene una larga historia de uso humano, medicinal, ritual y recreativo durante incontables milenios".

(SERVIMEDIA)
12 Jun 2019
MGR/gja