Salud

La Asociación de Intolerancias Alimentarias nace para mejorar la calidad de vida de los pacientes

MADRID
SERVIMEDIA

La Asociación de Intolerancias Alimentarias y Microbiota nace para mejorar la calidad de vida de los pacientes, promover la investigación de estos trastornos y reclamar un diagnóstico precoz para reducir sus molestos e invalidantes síntomas físicos y psicológicos, según explicó su presidente, el doctor Blas López Rueda.

En declaraciones a Servimedia, el doctor López destacó que estas intolerancias alimentarias no son una enfermedad en sí mismas sino “el síntoma o un posible signo de alarma de una patología latente que tiene el paciente y sobre la que habría que actuar directamente para mejorar o curar esa intolerancia”.

“Calculamos que existen más de 40 enfermedades involucradas en estas intolerancias pero si el origen no está en ellas habría que buscar entonces en algún proceso inflamatorio crónico del colon como la enfermedad de Crohn, la colitis ulcerosa u otras colitis”, añadió.

El doctor Blas López es un urólogo jubilado que comenzó a especializarse en intolerancias alimentarias a raíz de que a su hija la diagnosticaran una intolerancia a la fructosa. A partir de ese momento dedicó entre 14 y 18 horas al día a investigar sobre este trastorno y llegó al conocimiento de que estas personas tienen “una microbiota mal balanceada”.

Por lo tanto, “investigar en la microbiota ayudará a entender mejor estas intolerancias. Además de descubrir la enfermedad que las origina necesitamos modular esta microbiota para mejorar o curar estos trastornos. Una dieta puede modularla siempre y cuando el paciente pueda tolerar ciertos alimentos”.

CAMBIO DEL ESTILO DE VIDA

Según subrayó este experto, los casos de intolerancia van en aumento “porque hemos cambiado nuestra forma de vida. Hoy en día tenemos estrés y no comemos de forma sana. El procesado de alimentos ha sido muy grave para la salud porque hemos abandonado la dieta mediterránea”.

Además, estas intolerancias alimentarias “dejan sin vida a los pacientes porque no pueden tener vida social. Los síntomas son tan graves que un alto porcentaje de afectados no pueden salir de casa. Hay gente que tiene que dejar de estudiar y no puede trabajar. Algunos presentan lo que se llama ‘neblina mental’, es decir, pierden periodos de memoria, de atención y de concentración. A todo ello se añade el tener diarreas explosivas varias veces al día y que les impide salir de casa”.

A estos síntomas se añaden los dolores abdominales, flatulencias, distensión o hinchazón abdominal, migrañas y dolores articulares, lo que repercute tanto en la calidad de vida como en la autoestima y la vida social de aquellas personas que las padecen.

Un grupo de Facebook, administrado por el doctor López Rueda, en el que hoy participan más de 17.000 personas afectadas de problemas relacionados con las intolerancias alimentarias, fue el origen de la Asociación de Intolerancias Alimentarias y Microbiota, que representa a pacientes con intolerancia a la fructosa, sorbitol, lactosa o gluten, así como déficit de DAO, SIBO y parásitos.

Por todo ello, la Asociación de Intolerancias Alimentarias y Microbiota celebrará el próximo sábado 22 de junio una jornada de información médico-dietista sobre estos trastornos. Un evento que tendrá lugar en el Hospital Universitario Gregorio Marañón de Madrid.

(SERVIMEDIA)
19 Jun 2019
ABG/gja/caa/pai