Laboral

El 52% de los empleos en España podrían automatizarse durante esta década, según Randstad

MADRID
SERVIMEDIA

El 52% de los empleos en España podrían automatizarse durante esta década de forma parcial o total, según un informe publicado este jueves por Randstad, que estima que a escala mundial "uno de cada siete trabajadores perderán su trabajo actual".

Conforme al estudio, este proceso de automatización desemboca en una desaparición de puestos de trabajo tradicionales, lo que podría llevar a perder su puesto a uno de cada cinco trabajadores. Para intentar evitar esta digitalización “voraz”, el director de Randstad Research, Valentín Bote, sostuvo que “tanto empresas como trabajadores deben llevar a cabo estrategias de recualificación que ayuden a los trabajadores a seguir formándose”.

Prueba del estado cambiante del mercado laboral es el dato que aportó la compañía, que indica que un 65% de los niños de hoy en día trabajara en un trabajo que ahora no se conocen. Esto, según Bote, indica “el estado cambiante del mercado laboral”.

España aparece en su estudio entre los países con mayor riesgo de automatización, por debajo de mercados como Turquía, donde estima que sufrirán esta conversión el 59% de los puestos de trabajo, y Japón y Alemania, ambos con el 54%. Seguiría España, con el 52%, y otros países como Italia y Polonia (51% en ambos casos), Francia (49%), con una media en la OCDE del 46%. Entre los países con menor riesgo incluidos en el estudio figuran Suecia (36%), Estados Unidos (37%) o Reino Unido (38%).

Este informe sobre el futuro del mercado de trabajo también alerta sobre la reducción de los titulados en disciplinas como informática o ingeniería, que son las titulaciones más requeridas por las empresas españolas. Actualmente, la proporción de estudiantes que optan por estas disciplinas es inferior al 30%. Por eso, el director de Randstad Research reclamó a las universidades que “aumentasen el numero de plazas para estas titulaciones”, lo que ayudaría a “dinamizar y rejuvenecer” el mercado laboral.

Esta disminución va en consonancia con la de titulados universitarios en la franja de entre 25 y 30 años. Actualmente, un 26% de los jóvenes de esta franja carece de titulación superior, lo que unido al envejecimiento de la población lleva a las empresas a contratar a titulados extranjeros.

Por otro lado, la capacidad de adaptación y la flexibilidad tiene como principal referente al teletrabajo, una tendencia que no va a desaparecer tras la crisis. Así, según el CEO mundial de Randstad, Jacques van den Broek, “el trabajo será más flexible en cuanto a formato, alcance y contenido. El cambio repentino que ha supuesto trabajar desde casa durante parte del 2020 ha influido en la forma de pensar de muchas personas sobre la conciliación profesional y familiar, la satisfacción laboral y la ubicación física”.

Pero más allá del teletrabajo hay otras formas de trabajo, igualmente caracterizadas por su flexibilidad, que tienden a consolidarse. De hecho, cada vez son más frecuentes los contratos temporales, a tiempo parcial y bajo demanda, o el trabajo por agencia. El trabajo se ha vuelto más variado y menos rígido, debido a la combinación de las nuevas tecnologías con una mayor conectividad, así como con un cambio cultural más amplio.

En la mayoría de los países de ingresos altos, entre el 5% y el 25% de todos los trabajadores tienen contratos temporales. Un tipo de contratación que ofrece ventajas tanto al empresario como al trabajador, aseguran, y a menudo facilitan relaciones laborales que no habrían sido posibles de otro modo.

En concreto, permiten a las empresas ajustar rápidamente el tamaño y la composición de su plantilla en función de las necesidades, en especial en una situación tan cambiante como la actual, mientras que para el profesional le supone enriquecer su experiencia laboral y servir de eficaz puente hacia el empleo indefinido.

(SERVIMEDIA)
24 Jun 2021
JFL/ecr/clc