Concapa pide la dimisión de Jiménez "por ocultar los efectos dañinos de la píldora del día después"

MADRID
SERVIMEDIA

La Confederación Católica de Asociaciones de Padres de Alumnos (Concapa) pidió hoy la dimisión de la Ministra de Sanidad y Política Social, Trinidad Jiménez, "por ocultar los efectos dañinos" de la llamada píldora del día después, recogidos en un estudio de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios.

Según este trabajo, "no puede descartarse el riesgo de tromboembolismo venoso en mujeres que hicieran un uso no recomendado de los preparados de anticoncepción de urgencia", como es la píldora poscoital.

"Jiménez ha demostrado con estos hechos su gran desprecio tanto a la mujer como a la totalidad de la sociedad española al ocultar, deliberadamente, un informe que destaca dos graves reacciones adversas de su píldora: el riesgo del embarazo extrauterino y la posible aparición del tromboembolismo venoso, que ni se menciona en el prospecto", afirma la confederación.

Además, continúan los padres católicos, "la ineptitud de la ministra" se incrementa al haber encargado ella misma dicho informe a la Agencia Española de Medicamentos, pero después de haberse aprobado la venta de esta "bomba hormonal" para la que no se requiere receta médica alguna.

La ministra, señaló Concapa, afirmó hace cuatro meses cuando se aprobó su venta, que la píldora carece prácticamente de contraindicaciones y que los datos de seguridad recabados hasta la fecha no habían identificado riesgos inesperados".

Sin embargo, continuó esta organización, resulta que el medicamento "sí tiene importantes contraindicaciones que no recoge el prospecto".

"Aún más", dice, la Agencia Española de Medicamentos, en ese mismo informe, destaca el uso peligroso de esta píldora si es "repetido y frecuente"; algo que "está siendo lo habitual", al no requerir receta.

Ante "este gran engaño a la sociedad española", Concapa también exige el cambio del prospecto por uno que diga toda la verdad sobre esta píldora, así como la necesidad de pedir receta médica para comprarlo.

(SERVIMEDIA)
19 Ene 2010
IGA/jrv