En los pasillos del Congreso, antes de iniciar su primera comparecencia ante la Comisión de Defensa como ministro del ramo, reiteró que "ha quedado claro, en consecuencia, que el Gobierno ha dicho siempre la verdad, y que el Partido Popular ha mentido siempre", al mantener que fueron "detenciones políticas".

Sobre su dimisión, pedida tanto por el PP como por colectivos policiales, por su condición de ministro del Interior cuando se produjeron los hechos, Alonso se limitó a decir que el PP ha pedido su dimisión y la del resto de miembros del Gobierno "decenas y decenas de veces".

Alonso afirmó que la solicitud de dimisión es una "pura táctica política" de los populares que "tratan de aprovechar una sentencia judicial que condena a unos policías en una actuación puramente profesional". Además, manteniendo la línea del Gobierno, el ministro confrimó que se va a recurrir la sentencia.

En cuanto a la dimisión del delgado de Gobierno en Madrid, Constantino Méndez, quien fuera su subordinado cuando se produjeron los hechos, Alonso dijo que "ha dimitido en un acto de dignidad política que le honra", si bien matizó que dimite a pesar de que en la sentencia se recoge que "no tiene ningún tipo de responsabilidad personal".