Durante su intervención en el ‘XXIX Encuentro del sector financiero’ organizado por Deloitte, Sociedad de Tasación y ‘ABC’, Hernández de Cos subrayó como “principal mensaje” que, en un contexto de incertidumbre en el que “ha aumentado claramente la probabilidad de escenarios más adversos, se hace absolutamente necesario que las entidades utilicen los beneficios en el corto plazo, no solo para mantener sino para aumentar su capacidad de resistencia”.

Hernández de Cos consideró que “no debemos dejarnos llevar” por los beneficios que las entidades financieras tendrán “a corto plazo” ante la subida de los tipos de interés, y en su lugar, recomendó “aumentar la resiliencia en este año” de cara a los ejercicios venideros.

El gobernador insistió en que las entidades adopten una estrategia “prudente” en sus políticas de provisiones y planificación del capital, y en una “vigilancia estrecha” para poder actuar “con rapidez si se materializan riesgos”.

Indicó que los préstamos que tienen las entidades en vigilancia especial se sitúan en el 7,2%, por debajo del máximo alcanzado en septiembre de 2021 del 8,1%, aunque son niveles aún más elevados que antes de la pandemia.

También señaló que la traslación de la subida de los tipos de interés a los precios del crédito nuevo es “reducida” de momento, así como al coste medio de la deuda bancaria viva.

En cuanto al escenario macroeconómico, destacó que la incertidumbre “sigue produciendo riesgos a la baja sobre crecimiento económico y al alza sobre la inflación”, lo que pidió que se tenga en cuenta.

En el mercado inmobiliario destacó que se aprecian “señales incipientes de ralentización” en las compraventas, en el nuevo crédito, en visados de obra nueva “e incluso en menor medida en los precios de la vivienda”. Estas señales son “moderadas”, según precisó, y recordó que la situación actual es “de mayor equilibrio” en el sector inmobiliario frente a la de la crisis financiera.

En política fiscal, Hernández de Cos insistió en que las medidas sean focalizadas en los hogares de rentas más bajas y en las empresas que se vean más afectadas por la crisis energética, así como se adopten de manera temporal.

También urgió a iniciar ya el proceso de consolidación fiscal y consideró que el año 2023 “es una buena oportunidad” para ello.