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Belarra sostiene que la política fiscal del PP y Vox busca “acabar con los servicios públicos”

Madrid
SERVIMEDIA

La ministra de Derechos Sociales y Agenda 2030, Ione Belarra, subrayó este jueves que la política fiscal que proponen los partidos de derechas tiene como fin último “acabar con los servicios públicos”, ya que únicamente defienden los intereses del “1% privilegiado” de la sociedad.

Lo dijo durante su intervención en el acto de presentación del estudio ‘La transición intergeneracional de la pobreza como clave en la evolución de la pobreza y la desigualdad en España’, que acogió el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2030.

En su intervención, Ione Belarra aseveró que “no hay política social sin financiación” y transmitió a los representantes de la sociedad civil presentes en el acto que “política pública es mucho mejor con vuestro empuje, colaboración y cooperación de un valor incalculable”.

Expuso que la transmisión intergeneracional de la pobreza es un “fenómeno complejo, multidimensional y con múltiples manifestaciones”, que alude a “tener una casa donde estudiar, poder recibir clases de refuerzo, que tus padres te puedan ayudar a pagar la carrera o eres tú quien tienes que ayudarles a pagar los gastos de la casa, la profesión de tus padres o a qué piensan en tu entorno qué vas a ser de mayor”.

Destacó que la “emergencia climática y la desigualdad social” son “los problemas centrales de la humanidad” que, a su juicio, “tienen solución, pero no se ponen en marcha de una manera contundente y valiente”

Ione Belarra denunció que “hay muchos intereses políticos, económicos y mediáticos” empeñados en “desdibujar” los “contornos de la desigualdad y la pobreza”, y que propugnan una serie de políticas para “perpetuarlas” y presentarlas como algo “natural o inevitable”.

Afirmó que esas políticas el PP y Vox suelen presentarlas de un modo “evidente”, al hablar de conceder becas a las rentas altas, al reducir a “paguita” el IMV y al bajar los impuestos a las rentas del capital. “Su política fiscal es una política centrada en acabar con los servicios públicos”, reseñó, puesto que únicamente defienden los intereses del “1% privilegiado” de la sociedad y desdeñan al “99%” restante que “necesita que se garanticen sus derechos”.

Del mismo modo, abominó los discursos de los partidos de derechas centrados en la meritocracia, cuyo eje central es que “el éxito económico y profesional depende del esfuerzo”, un señuelo con el que convierten al individuo en el único responsable de su posición en la sociedad.

Esto le sirvió para observar que “los datos dilapidan el discurso meritocrático”, puesto que las personas nacidas en hogares que se encuentran en situación de pobreza tienen un 20% más de probabilidades de caer en esa situación que los nacidos en familias acomodadas.

También expuso que “la riqueza de más de la mitad de los milmillonarios viene de la herencia”, lo que le sirvió para colegir que de ahí procede la “obsesión” del PP y Vox de “eliminar el impuesto de sucesiones”.

Ante esta situación, indicó que su objetivo “no es que pocas personas cojan el ascensor social, como si fueran héroes que se han sobrepuestos a difíciles condiciones sociales, ni instalar un montacargas en el que quepa mucha gente para subir a los más alto del edificio; quiero construir un hogar en una planta baja, accesible, confortable, en el que los niños crezcan seguros, felices, desplegando al máximo todas las capacidades”.

Luego de alertar de que la pobreza “no sólo se transmite de padres a hijos, sino de abuelo a nietos” en España, manifestó que “si queremos acabar con la desigualdad, necesitamos políticas públicas, contundentes, valientes, decididas, que equilibren la balanza”.

Ione Belarra defendió que el Gobierno “ha trabajado esa senda, la de abordar lo urgente sin olvidar lo importante”, como lo evidencia, a su juicio, la aprobación del IMV, la Garantía Infantil, la Ley de Vivienda o los permisos para auspiciar la conciliación acordados en el último Consejo de Ministros.

A pesar de ello, reconoció que “queda muchísimo por hacer”, ya que la pobreza y la desigualdad representan un “problema profundo”, que no se ataja con “retoques”, sino con “mucha voluntad, mucha contundencia y mucho conocimiento profesional”.

“La desigualdad es un muro que obstaculiza la construcción de una democracia plena en España y sin políticas públicas que la atajen no tendremos una democracia a la altura de lo que se merece la gente de este país”, concluyó.

(SERVIMEDIA)
29 Jun 2023
MST/gja