Díaz se expresó en estos términos durante la inauguración del foro de alto nivel ‘Global Deal’, que se celebra en Madrid, y en el que intervinieron también el director general de la OIT, Gilbert F. Houngbo, y el secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), Mathias Cormann.

En su intervención, Díaz subrayó la importancia del diálogo social, porque “es siempre el antídoto más efectivo contra la violencia. Y, además, el diálogo social es una herramienta de legitimidad democrática que teje redes y permite alcanzar acuerdos beneficiosos”.

"España ha dado pasos decisivos en este sentido, con 14 acuerdos de diálogo social en esta legislatura", apuntó Díaz, quien puso como ejemplo la ley del teletrabajo y los ERTE extraordinarios de la pandemia de covid-19. Asimismo, valoró que la reforma laboral está permitiendo "mejorar el atávico" mercado de trabajo en España, con casi la mitad de contratos de carácter indefinidos.

También ensalzó el diálogo social para avanzar en materia de justicia social y en la lucha contra el cambio climático, recordando que España ha vivido este verano en “una permanente ola de calor”. Además, alertó de que “ante la emergencia climática todos somos vulnerables”, pero especialmente algunos colectivos como los jóvenes.

TRANSICIÓN DIGITAL

“La eficiencia económica es posible si se respeta el medio ambiente y los derechos fundamentales y laborales. Es nuestra responsabilidad alentar modelos de gobernanza inclusivos y suscribir pactos a nivel global”, enfatizó la ministra, quien también se refirió a la importancia de afrontar “una transición digital justa y sin brechas”.

“No hay dos realidades como segmentos que nunca se llegan a cruzar”, agregó la vicepresidenta segunda, para incidir después en que “la inteligencia artificial no puede ser opaca”. A su criterio, “nadie”, pero especialmente las grandes corporaciones, “puede hurtar a la sociedad el idioma con el que vamos a escribir el futuro”, que es el digital.

Por ello, saludó la entrada en vigor de la legislación europea sobre mercados digitales, que “limita” el “dominio” de las grandes plataformas digitales y establece regulación frente a las “conductas anticompetitivas”.

Díaz también pidió reforzar la “democracia” en las relaciones laborales, porque “no solo nos tiene que importar la cantidad, sino la calidad”, estimulando la formación de los trabajadores a lo largo de la vida para que puedan ir adaptándose a las necesidades del mercado de trabajo.

En definitiva, la titular de Trabajo instó a luchar contra la “precariedad” y la alta temporalidad para que nadie quede atrás, porque “está en juego el núcleo mismo de nuestras democracias”. De hecho, concluyó avisando de que “de los hombres y mujeres que no tienen nada que perder beben los autoritarismos“.

GUERRA EN UCRANIA

Por su parte, el secretario general de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) destacó el “sufrimiento” que está causando la invasión de Ucrania por parte de Rusia en los ciudadanos ucranianos, pero también en otros países, especialmente en el caso de los trabajadores con empleos más precarios.

Asimismo, apremió a reforzar la lucha contra el cambio climático y urgió a “trabajar duro” para avanzar en la senda de la “descarbonización”, mejorando “nuestro enfoque” para “reciclar a trabajadores” y usando el “poder del diálogo social” para facilitar la transición verde.

Igualmente, Mathias Cormann pidió garantizar los derechos laborales de los “trabajadores no convencionales”, de quienes dijo que tienen en torno a un 40% menos de posibilidades de acceder a las prestaciones por desempleo. También alertó de las mayores dificultades que encuentran las mujeres para tener empleos a tiempo completo.

Finalmente, el director general de la OIT avisó de que la situación del mercado de trabajo “no es muy halagüeña” y ya está empezando a verse afectado por las diferentes crisis que se están dando. Además, defendió que el diálogo social puede ser una “herramienta potente” para avanzar en la transición ecológica y digital.

Houngbo llamó a alcanzar una “economía sostenible, igualitaria y que gire en torno al ser humano”. Sin ello, aventuró que no podrán cumplirse los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de la Agenda 2030 y apuntó que el ‘Global Deal’ “puede ayudarnos a ubicar el diálogo social en el núcleo de la agenda internacional”.