Este evento se realizó de forma virtual por parte de la Delegación de Derechos Humanos y para la Convención del Comité Español de Representantes de Personas con Discapacidad (Cermi).

En la charla participaron como ponentes la técnica de investigación, Nuria Guilló, y el técnico de asesoría jurídica, Javier Murillo, ambos en representación de Liber; el responsable del área de Cohesión Social y Coordinación Sociosanitaria de la Confederación Española de Personas con Discapacidad Física y Orgánica (Cocemfe), Alejandro Fernández García; la responsable de Derechos de la Confederación Autismo España, Paloma Rodrigo Gutiérrez de la Cámara; y la asesora jurídica de la Confederación Salud Mental España, Irene Muñoz Escandell. El acto fue moderado por el delegado del Cermi Estatal para los Derechos Humanos y la Convención de la ONU de la Discapacidad, Gregorio Saravia Méndez.

Los ponentes coincidieron en la importancia de contar con un equipo multidisciplinar durante todo el proceso de elaboración de los informes. De esta forma, la representante de Liber, Nuria Guilló, destacó el Observatorio de Derechos realizado cada año por dicha entidad a través de una red compuesta por “el área social de las entidades, así como por el área jurídica y los equipos de investigación”.

Por su parte, Javier Murillo completó la intervención de Guilló añadiendo que “la accesibilidad tanto a la hora de elaborar los informes como en el momento de la difusión es fundamental”. El resto de los ponentes coincidieron también en este punto sobre el que Gregorio Saravia Méndez añadió que hay que seguir trabajando para mejorar, debido a que el artículo 9 sobre la accesibilidad es uno de los más vulnerados según se desprende de los informes realizados por el CERMI, durante los últimos 10 años, en los que se analiza “artículo por artículo de la Convención para señalar lo que tiene ver con las denuncias que recogemos, las propuestas de mejora que generamos y los avances que se producen”.

Otro punto que se abordó en el conversatorio es el de la importancia de la exploración de nuevos formatos a través de la tecnología y la comunicación que supone, según Saravia, “un reto para el Cermi en el que se está incursionando”, como también lo está haciendo Cocemfe. Sobre este asunto, Alejandro Fernández García reconoció que en la entidad “nos encontramos con que no llegamos a todas las situaciones que nos gustaría llegar. Por ello, estamos estudiando diferentes formatos para conseguirlo como aplicaciones móviles que nos permiten identificar vulneraciones”.

Entre los derechos vulnerados, los ponentes resaltaron con preocupación el de la accesibilidad, la educación de los niños y niñas con TEA y también en el ámbito de la salud mental. Por un lado, Paloma Rodrigo declaró que este es uno de los principales puntos en los que se debe trabajar, según se desprende de los informes de la Unidad de Derechos de la Confederación Autismo España. Así, denunció que “casi la mitad de niños y niñas con trastorno del espectro autista sufren acoso escolar alguna vez en su vida”.

Por otro lado, Irene Muñoz Escandell, expresó que “el mundo de la infancia que es el de la prevención está muy en pañales en el ámbito de la salud mental”. A esto añadió que en las zonas rurales también queda mucho por hacer ya que hay una tendencia de mayor vulneración de los derechos de personas con discapacidad.

Por último, Gregorio Saravia hizo un llamamiento a “mirar hacia adentro de las propias entidades. Muchas veces estamos trabajando bajo presión con muchas prisas y perdemos de vista la importancia de manejar otros tiempos para la posibilidad de comprensión de otras personas. Otras formas de lenguaje que se vuelvan más claras”.

Recordó que “la discriminación no es un concepto abstracto es algo que se concreta en la vida de personas a las que muchas veces se les niegan derechos que están ya recogidos en textos legales”. Con esta reflexión, los ponentes concluyeron que hay mucho logrado en el ámbito de los derechos humanos para las personas con discapacidad, pero que todavía queda mucho trabajo por hacer mediante “una red colaborativa y de cohesión del sector”.