Discapacidad

El padre de una niña con síndrome de Down dice a Reig Pla que su hija es “la manifestación del amor de Dios” y no del pecado

- Ramón Pinna trabaja en el asociacionismo de las personas con discapacidad y se declara católico

MADRID
SERVIMEDIA

El presidente de la Asociación Achalay e integrante de la Junta Directiva de Plena inclusión Madrid, Ramón Pinna, padre también de una niña con síndrome de Down, indicó este miércoles al obispo emérito de Alcalá de Henares, Juan Antonio Reig Pla, que su hija es “la manifestación más pura del amor de Dios” y no del pecado.

Así lo indicó en una carta dirigida al prelado y remitida a Servimedia, en respuesta a la homilía de Reig Pla el pasado 11 de mayo en Alba de Tormes (Salamanca) donde se refirió a los niños que nacen con discapacidad física, intelectual o psíquica como “herencia del pecado y del desorden de la naturaleza”.

“La ciencia nos ha explicado ya muchas veces, señor obispo emérito, que en el origen de la discapacidad no están ni el pecado original, ni el desorden de la naturaleza, sino el azar genético”, indicó Pinna, que se manifestó abiertamente católico y lamentó la “tibia disculpa” con la que el prelado explicó las palabras que desataron la polémica entre el asociacionismo de personas con discapacidad y que el Gobierno denunció ante la Fiscalía para que investigue si son constitutivas de delito.

“Desde el respeto, pero con la legitimidad que me da el ser tan Iglesia como usted, le invito a repasar algunas nociones básicas de primero de cristianismo, de las que seguro escuchó hablar en el Seminario de Valencia, cuando estudió Teología hace cincuenta años”, planteó el padre.

Pinna rebatió la expresión del emérito: “…Tú y yo venimos del infinito amor de Dios, que nos ha dado la vida a través de nuestros padres, y esto asegura tu origen, ¡no eres un fracaso! Ni desde el origen. También para los niños que nacen con discapacidad física intelectual o psíquica, pero esto ya es herencia del pecado y del desorden de la naturaleza”.

El padre señaló que no quería entrar “en las connotaciones del señalamiento al vulnerable, de la estigmatización del colectivo, del desprecio al semejante, del dolor innecesario y gratuito causado a nuestros hijos, hermanos o amigos, de lo deshumanizado del comentario, o de lo rancio, casposo y decimonónico del argumento”, para hablar a Reig Pla subido “en su púlpito” con las Escrituras “en la mano”.

VER A DIOS EN SU HIJA

“Es cierto que yo no he estudiado teología, pero tengo una hija con discapacidad, y en ella y por ella, he aprendido a ver a Dios con más facilidad, sabe usted, porque la veo más creada por Él que a nadie, exactamente a su imagen y semejanza, como nos decía el relato de la Creación en el Génesis”.

“Mi hija es justo así, justo como dice San Pablo que es el Amor. Es comprensiva, servicial, no tiene envidia; no presume ni se engríe; no es mal educada ni egoísta; no se irrita, no lleva cuentas del mal; no se alegra de la injusticia, sino que goza con la verdad. Mi hija disculpa sin límites, cree sin límites, espera sin límites, aguanta sin límites”, añadió.

Pinna también citó al apóstol San Juan: “En esto consiste el amor, en que Él (Dios) nos amó primero”. “Pues le aseguro, Señor Obispo, que ese gen, el de amar siempre primero, también lo lleva mi hija, además de la trisomía en el 21”, prosiguió en la carta.

El presidente de la Asociación Achalay preguntó a continuación: “¿Le parece suficiente como para pensar que en origen mismo de la vida de mi hija no está el pecado, sino la manifestación más pura del amor de Dios? ¿Conoce o ha conocido usted a alguien del que pueda pensar que se parezca tanto a Dios, como lo pueda pensar yo de mi hija?”.

“Me falta conocimiento del castellano para saber si su sesgo es sectario, soberbio, supremacista, o sencillamente estúpido, y por supuesto no acepto sus disculpas de cartón piedra y nulo sentimiento”, escribió el padre, que también apuntó que no pierde “la esperanza” de que la Iglesia “comience a caminar de una vez, firme y decidida, con todos sus medios y recursos, por los mismos senderos por los que caminan las personas con discapacidad, yendo de su mano, y sintiendo y aprendiendo de ellas”.

(SERVIMEDIA)
21 Mayo 2025
AHP/clc