Así lo indicó Puigdemont en rueda de prensa desde el Parlamento Europeo, después de que el Tribunal General de la Unión Europea (TGUE) le haya retirado la inmunidad a él y a sus exconsellers y también eurodiputados Toni Comín y Clara Ponsatí, quienes habían recurrido la decisión de la Eurocámara.

Puigdemont subrayó que “no era lo que nosotros estábamos esperando”, pero “tampoco se puede decir que no estábamos preparados para este escenario”. Ahora, continuó, les toca “otra vez remontar una situación adversa” e insistió en que presentarán “un recurso lo más pronto posible y en la forma más ambiciosa posible” esperando una resolución “favorable”.

También expuso que la sentencia “abre algunas brechas” porque se está hablando de los derechos que tienen los “disidentes”, los “defensores de causas que pueden incomodar a los Estados” a tener derecho a defenderlas “en igualdad” de condiciones que el resto y “no tener que sufrir casos de persecución y acoso político”.

Asimismo, matizó que “la opción del regreso está exactamente en el mismo punto que estaba antes de la sentencia, igual de lejos o igual de cerca” y destacó que “ha quedado acreditado” que “no nos dedicamos a traficar con drogas, ni a comprar armas”, sino con “referéndums y con votaciones”, así como que “se nos persigue por razones estrictamente políticas”.

EURORDEN DE LLARENA

Por su parte, Comín afirmó que tanto si ganaban como si perdían su situación “cambiaba relativamente poco”, aunque reconoció que para ellos era importante ganar porque habría significado que “el Tribunal de Luxemburgo reconoce que España no se comporta como un Estado de Derecho”.

También recordó que el Tribunal de Justicia “tiene una responsabilidad en relación con los derechos fundamentales más fuerte” que la que tiene el Tribunal General y confesó que esperan que “sus argumentos sean tenidos en cuenta” por esta institución, ya que, aunque el TGUE desestimó “todos los motivos” alegados por estos tres eurodiputados, la sentencia se puede recurrir ante el TJUE.

Sobre el juez Pablo Llarena, Comín explico que “no puede sacar una nueva eurorden sin pedir antes un nuevo suplicatorio al Parlamento Europeo”. A su juicio, lo que “debería hacer” es “pedir un nuevo suplicatorio”, pero manifestó que “lo que prevemos que hará es emitir la eurorden sin pedirlo”.

SENTENCIA

El abogado Gonzalo Boye declaró que “no es la sentencia que deseábamos”, y que, pese a que la respetan, “discrepan”. De hecho, señaló que tiene “puntos muy débiles y flojos en algunos aspectos” y “omite cosas que ya están resueltas” por el TJUE como, por ejemplo, “el caso de que el Tribunal Supremo no es el órgano preestablecido por ley”.

“Sabemos lo que estamos haciendo y vamos a explicar en nuestro recurso por qué creemos que el tribunal se ha equivocado”, expuso. Además, indicó que un punto de la sentencia que le “preocupa” es que dice que la inmunidad “no afecta a materia de derechos fundamentales”. “Eso es coger una vía peligrosísima”, alertó.

Asimismo, indicó que la sentencia “lo que no discute es que ellos conservan la inmunidad de desplazamiento” y “lo que el juez Llarena está planteando es la inmunidad en el territorio del Estado español no fuera del territorio porque eso la sentencia lo deja bastante claro”. Por ello, Puigdemont tiene previsto viajar el lunes a Estrasburgo.

EXPECTATIVAS POLÍTICAS

En la rueda de prensa, Ponsatí expresó que hoy es un día “difícil” porque la situación personal de sus compañeros “de exilio” es “un poco más complicada que ayer”, pero sobre todo porque si la sentencia se mantiene en segunda instancia en el TJUE los derechos políticos de todos estarán “mucho menos protegidos en Europa ante los abusos de los Estados autoritarios”.

“Lo de hoy es un final de etapa que debería hacer rectificar la manera como hemos gestionado las expectativas políticas de las estrategias posteriores a 2017”, dijo Ponsatí, quien aseguró que ni el Gobierno “autonomista” de la Generalitat catalana, ni “los pactos con el PSOE” pueden “ofrecer nada a la ciudadanía que no sea la rendición y la renuncia a la catalanidad”.

Por tanto, manifestó que la “persecución judicial y política del independentismo” no se acabará “hasta que no seamos libres, hasta que no seamos un Estado independiente” e incidió en que “no hay ningún acuerdo con ningún partido político español que no sea en el fondo una rendición”. “Basta de ficciones”, pidió.