Díaz estuvo hasta en tres ocasiones en mítines con Colau, los dos primeros sábados de la campaña y también en su cierre este pasado viernes, un evento que Belarra y Montero escenificaron en Madrid, donde también fue la pegada de carteles, mientras el exlíder de Podemos, Pablo Iglesias, lo hizo en Valencia.

Finalmente, Colau, que, junto a Díaz, se pasó la campaña alertando del peligro de que el candidato del PSC, Jaume Collboni, pactara un Gobierno con el de Junts per Catalunya, Xavier Trias, en su comparecencia tras el escrutinio tuvo que ofrecerle al primero una negociación para investirle. Trias ganó las elecciones con 11 escaños, Collboni quedó segundo con 10, y ella tercera con nueve.

Por lo que respecta a la Comunidad de Madrid, la candidatura de Podemos, IU y Alianza Verde liderada por Alejandra Jacinto, se quedó en un 4,74% de los votos, a un cuarto de punto porcentual del 5% que hace de umbral para obtener representación en la Asamblea. Si lo hubiera conseguido, habría entrado con siete escaños. En el Ayuntamiento de Madrid, faltó aún menos, pues la lista encabezada por Roberto Sotomayor alcanzó un 4,87%. Pero el hecho es que en ambas administraciones Unidas Podemos carecerá de voz en las instituciones.

Otro tanto ha sucedido en la Comunidad Valenciana, la otra región donde la entrada de UP en las Cortes y el Ayuntamiento de la capital se consideraba necesaria para reeditar gobiernos progresistas. Sin embargo, ni la candidatura autonómica liderada por Héctor Illueca, con un 3,52%, ni la municipal encabezada por Pilar Lima, que sacó un 2,33%, lograron tal objetivo.

OTROS LUGARES

Fuera de los tres focos centrales de la campaña, los resultados para Unidas Podemos no han sido mucho mejores. En las comunidades donde Podemos e IU se presentaron juntos a las elecciones, han mantenido el tipo en Extremadura, con cuatro escaños, los mismos que en 2019, pero serán irrelevantes ante la suma de PP y Vox. Otro tanto en Navarra, con tres, que no serían necesarios si se ponen de acuerdo PSN, Bildu y Geroa Bai y tampoco bastarían si se baja la tercera formación, cercana al PNV. En ambas regiones hizo campaña en su favor Yolanda Díaz.

Tampoco valdrán de mucho los dos escaños obtenidos en Baleares, Murcia y La Rioja, dado que el Partido Popular podrá gobernar con Vox. En Baleares, además, Unidas Podemos ha quedado muy por debajo de los cuatro de Més por Mallorca, la formación alineada en el Acuerdo del Turia de Más País y Compromís, pese a que hasta ahora formaba parte del Gobierno. Y en el archipiélago también mitineó la líder de Sumar.

Algo parecido sucede en Asturias, donde Podemos se presentó por un lado y Más País e Izquierda Unida por otro; aquí, la candidatura liderada por Covadonga Tomé ha logrado, tras su enfrentamiento con la dirección estatal, sólo escaño para ésta, mientras que IU y Más País han logrado tres. En Aragón, también por separado, Podemos e IU han sacado un solo parlamentario cada uno, y saldrán del Gobierno autonómico, ahora en manos del PP.

Finalmente, a Castilla-La Mancha y Cantabria, donde Unidas Podemos ya no alcanzó representación en las autonómicas de 2019, se ha unido este domingo Canarias, comunidad de cuyo gobierno formaba parte como consejera Noemí Santana. Sin embargo, ni esta candidata de UP ni el exdirigente de Podemos Alberto Rodríguez, al frente de su Proyecto Drago, han logrado entrar en el Parlamento.

Tras el batacazo general, Díaz no realizó ningún comentario público, ni siquiera en redes sociales, en tanto que Belarra publicó un tuit reconociendo "nuestros resultados son malos" y apuntando que "ahora toca ponerse a trabajar"; un mensaje que redifundieron, sin mayor comentario, Montero e Iglesias. La rueda de prensa de valoración en la sede estatal de Podemos se la dejaron a Jacinto y Sotomayor.