La decisión fue avanzada por Díaz durante la clausura de la presentación del Plan de la Economía Social 2024-2025 durante un acto celebrado en el Ministerio de Trabajo, al que acudieron representantes del sector de la economía social en España.

“Les doy la enhorabuena a la familia de la economía social valenciana”, apuntó la vicepresidenta segunda, quien comentó que había hablado “previamente” con las administraciones valencianas para trasladar la decisión adoptada “con rigor”.

La titular de Trabajo también confirmó que se va a aprobar la ley integral de la economía social, que quedó “interrumpida” por el adelanto de las elecciones del 23 de julio. Dicha norma actualiza la propia Ley de economía social, pero también la de cooperativas y la de empresas de inserción. “No tratamos solo de regular la economía social, sino de fomentarla”, añadió.

Asimismo, Díaz recordó que está en marcha el Perte de la Economía Social y de los Cuidados, dotado con más de 800 millones de euros de los fondos europeos, y pidió “responsabilidad” y colaboración entre todos para “cumplir con nuestro país” y desplegarlo con éxito.

VÍNCULOS CON EL PAPA

Igualmente, la ministra aprovechó que el 2 de febrero va a volver a verse con el papa Francisco y defendió que existen similitudes entre esta forma de empresa y la doctrina del pontífice.

“Hay enormes vínculos entre la economía social y el discurso del papa Francisco”, declaró Díaz, quien dijo que coincide con lo que dice Francisco de que “es preciso que nadie quede al margen de la vida”. “Esta es la esencia de la economía social. Es lo que os hace diferentes y os muestra como esa esperanza concreta”, reforzó la vicepresidenta.

DÉFICIT DE VISIBILIDAD

En su alocución, la ministra destacó su “preocupación” y “compromiso” por “garantizar derechos a las personas” y “mejorar la calidad del trabajo”, al tiempo que repasó medidas adoptadas en los últimos años en favor de la economía social.

Entre ellas, puso el foco en que por primera vez un ministerio lleve el “apellido” de Economía Social, así como que luego pasara a tener rango de vicepresidencia. Igualmente, valoró la creación de una Dirección General específica, así como de un Comisionado y, hace pocas semanas, con la nueva legislatura, una Secretaría de Estado de Economía Social, a cuyo frente se sitúa Amparo Merino.

“Ese déficit de visibilidad que teníamos creo que lo estamos reparando. Indudablemente queda mucho por hacer, pero la presencia de nuestra querida catedrática Amparo Merino va, sin lugar a dudas, a realzar todavía más la singularidad de una economía que tiene todas las potencialidades del mundo”, recalcó la vicepresidenta segunda.

A su juicio, la economía social es una “alternativa democrática, verde, feminista, solidaria, inclusiva, que crea comunidad como ninguna otra fórmula económica y que hace algo fundamental, que es poner la economía al servicio de las personas para hacer algo clave en democracia, que es gestionar los recursos con equidad”.