El objetivo de la misma es que el Estado, a través de sus administraciones y poderes públicos, contribuya a hacer efectivos los derechos humanos de las personas con discapacidad y sus familias. Poner en marcha “un programa ambicioso de reformas para que los Derechos presidan el paisaje donde transitan las personas con discapacidad”, dentro del marco del Plan de Transformación y Resiliencia España Puede.

Los fondos europeos se destinarán a reparar y a ampliar derechos en ámbitos clave para las personas con discapacidad como el acceso a servicios públicos, la vivienda, la educación, la salud o la cultura, que redundarán en la generación de oportunidades y nuevos yacimientos de empleo para este colectivo.

La inclusión de la perspectiva de género en la nueva Estrategia pretende “saldar una deuda con las mujeres y niñas con discapacidad” que viven “en situación de desigualdad por muchas realidades y opresiones históricas. Asimismo, dará respuesta a otros desafíos transversales como la emergencia climática y el reto demográfico, ya que son cuestiones que competen a todos los ciudadanos. Del mismo modo, la Estrategia deberá estar con la España de los pueblos, de las aldeas y de los campos donde también viven personas con discapacidad, a las que hay que escuchar y acompañar”, resaltaron las fuentes consultadas.